La Directiva de Emisiones Industriales (Directiva 2012/75/UE, DEI) unifica la Directiva IPPC y otras disposiciones sectoriales que establecen requisitos para obtener autorizaciones, así como los límites de emisión de contaminantes de las instalaciones afectadas, estableciendo entre otras cuestiones, nuevas actividades afectadas, un informe base de suelos y que las Autorizaciones Ambientales Integradas (AAI) fijen los límites de emisión de acuerdo a los que están asociados a las Mejores Técnicas Disponibles o MTD (BAT – AELs).
Actualmente la aplicación de la Directiva DEI se enfrenta al reto de que las Autorizaciones Ambientales Integradas tengan en cuenta los documentos de conclusiones de Mejores Técnicas Disponibles (MTD-C o BATC), cuando se cumplen 4 años de las primeras conclusiones publicadas para algunos de los sectores dentro del ámbito de la Directiva. Y ello compatibilizando el cumplimiento legal y la competitividad de las empresas en el escenario económico que tenemos de contexto.